Capitulo 25 (Antepenultimo)

Llegamos a nuestra casa emocionados, no nos esperabamos que fueran gemelos. Llame a mis padres y les dije. Raymond hizo lo mismo con su familia, estabamos en la habitacion, acostados en la cama. hablando del futuro que no esperaba.

-Ya que seran niños, cosa que te lo dije- Me eche a reir-¿Que nombres se te ocurren? Me gustaria que uno se llamara Daniel-Suspire con cierta tristeza, senti que Ray me abrazaba mas.

-Si tuviste razon, pero despues que nazcan los gemelos, comenzaremos a trabajar en la niña.

-Oye, tu crees que es facil-Me hice la enojada- Claro como no eres tu que tienes nauseas,mareos, etc etc etc.

Solto una carcajada haciendome estremecer, amaba su sonrisa.

-Lo se corazon. Ese trabajo lo dejamos pendiente-Me guiño el ojo, mordiendose los labios. Enseguida mi corazon comenzo a latir rapido, sabia lo que queria.

-Ray, deja de hacer eso por favor ja ja ja.

-¿Que? ¿seducirte? no tengo culpa que ame tanto a mi esposa y futura madre de mis hijos.

-Que lindo eres-Le dio un beso en la boca- Aun no me has dicho el nombre.

-Bueno me gusta el nombre de Damian.

-Me encanta combina Daniel y Damian. Entonces asi se llamaran nuestros bebesitos, solo faltan 5 meses para tenerlos en nuestros brazos.

Ya todo el mundo sabia de mi embarazo , cuando digo todos es todos, el chisme corrio como polvora la verdad no me importaba, estaba realmente feliz tenia una familia maravilloso, un esposo perfecto y solo faltaban que nacieran mis gemelitos, que por cierto a tan solo a las 37 semanas de embarazo, rompi fuente estaba realmente asustada, aunque fui a clases de prenatal, para estar preparada pero en ese momento se me olvido todo, si acaso me acordaba de respirar. Me acuerdo ese momento Raymond estaba en la cocina y yo estaba en la habitacion, comence a gritar llamandolo, le dije que era el momento de ir al hospital, no paraba de reirme estaba super histerico no sabia que hacer estaba peor que yo.

Inicio- FlashBlack

-Oh Dios mio ¿que hago _______, llamo una ambulancia? ¿que debo hacer?-Caminando de un lado a otro- Respira mi amor, respira 1,2,3-Se sento en la cama, sosteniendo mi mano.

-Primero calmarte-Con la respiracion agitada, pero aun si me reia-Tienes que relajarte, toma las cosas de los bebes, llevas a la camioneta, yo me ire a vestir, y despues subes ayudarme a bajar las escaleras, como lo ensayamos mi amor, no es momento de volvernos locos.

-Si, si si tienes razon-Estaba tan nervioso-Ahora vuelvo-Se iba hacia a la puerta y se regreso de nuevo- Segura, que estas bien?

-Si Raymond Ayala, estoy bien Ja ja ja.

Hiso todo como se lo pedi, nos fuimos al hospital. Donde ya esperaban nuestras familias, estaba muy nerviosa y ansiosa, como eran gemelos y aun no se cumplia el mes, no fue parto natural como yo queria, Ray estuvo conmigo en todo momento alentandome, diciendome cosas lindas al oido, que me amaba. Despues de 5 horas en el hospital, por fin tenia a mis bebes entre mis brazos aunque solo los tuve por un momento tuvieron que llevarselo a revision, me instalaron en una habitacion. Todos los que esperaban a fuera entraron a felicitarnos, estaba ansiosos por ver a los nuevos integrantes de la familia. Entro una enfermera que venia con mis pequeños angelitos, Ray tomo uno con sumo cuidado, despues de darle un beso, me coloco en los brazos y despues sostuvo al otro, le dio un beso tambien. Vi que sus ojos se llenaban de lagrimas, me giro a verme me sonrio. se acerco lentamente hasta besarme. En ese instante comenzaron a llorar los dos al mismo tiempo, nos reimos todos.

-Tienen hambre nuestros nieticos-Decia mi mama, mientras acariciaba la mejilla de su nieto.

-Shhh no llores Daniel, te amo- Lo bese con ternura.

-Entonces tu eres Damian-Ray le sonrio a su hijo, comenzo a cantarle, este enseguida dejo de llorar-Mi campeon dejo de llorar-Reia con orgullo, despues de alimentarlos ambos, se los llevaron, no queria separarme de ellos.

-Son hermosos nuestros hijos.

-Si como tu. Gracias me haces feliz-Beso mi frente- Te amo.

-Yo te amo a ti.

Fin-FlashBack

Pase dos dias en el hospital hasta que me dieron de alta, instalamos a nuestros gemelos en su habitacion. Aunque fue bien dura la primera semana, no dejaban de llorar. Pero disfrutabamos mucho nuestro papel de padres.